sábado, 7 de marzo de 2009

¿Existe la democracia?

Esta pregunta me la he hecho hace ya algo de tiempo. La democracia es el sistema de gobierno que nuestro país, junto con todo el hemisferio, sostiene como bandera de organización de los Estados. Sin embargo, ¿es la democracia real o simplemente una ilusión de la realidad?

Veamos nuestro caso, México. La “democracia” que vivimos durante buena parte del siglo XX no fue sino una caricatura. El partido que estuvo en el poder por más de setenta años usaba todo el poder del Estado para ser reelegido una y otra vez. Tuvo que ser un miembro de su mismo partido el que dijera “basta” en 2000 para que hubiese un cambio en el poder. Hay algo que me intriga, sin embargo. Al igual que en las épocas del PRI, sigo viendo que los ricos son más ricos y los pobres más pobres. La democracia no ha hecho nada para mejorar las condiciones de este país. Hoy por hoy, estoy seguro que casi nadie apuesta por ningún partido político. Votamos por el menos peor. Yo, si así sigue todo sigue como va, terminaré por anular mi voto.

Aunque el punto de esta entrada no es dilucidar quién será candidato, sí quiero adentrarme en el por qué. ¿Quién define? Desde mi punto de vista, no existe una democracia, sino una ilusión de la misma. Para mí es muy evidente: los intereses de los dueños de la economía nacional (y mundial) son los que dictan, ultimadamente, quienes son aquellos quienes serán votados.

Si no es así, ¿por qué con cada diferente gobierno no vemos una mejor distribución de la riqueza? Y no me mal entiendan, no comulgo con el comunismo ni con el capitalismo salvaje, aunque debo admitir que, económicamente, prefiero el último. Como bien dijo Aristóteles “la virtud está en el medio”. Pero bueno, regresando al punto, ¿no es interesante observar cómo los políticos nunca se meten con los empresarios ni viceversa? Es porque son los grandes capitales quienes también controlan la política. Ellos no se meten en que si son verdes, azules, rojos o amarillos. Son prácticos, ¿quién me mantendrá y/o incrementará mi capital?

Es por esta simple razón que me da risa cuando veo a los títeres que son los políticos desgañitarse en absurdas peleas por el poder, cuando realmente no lo tienen. Y esto no es exclusivo de nuestro querido México, sino de todo el mundo. Los Estados Unidos de América, la más perfecta democracia (según ellos, claro), son el perfecto ejemplo que son los intereses económicos quienes controlan ese país. El actual presidente no fue elegido por presión social ni mucho menos: así convenía a todos esos intereses.

¿Por qué, ahora con la crisis que nos aqueja, los gobiernos simplemente no dejan en la ignominia (como lo hacen con los gobernados) a aquellos intereses que por más codicia provocaron este global desaguisado económico? La razón, nuevamente, porque son los intereses quienes controlan a los gobiernos, exigiéndoles su intervención (en metálico, por supuesto), a costa de endeudar a los Estados y por lo tanto, a los gobernados.

Siempre ha sido de esa manera; es como es el curso de la Historia. ¿Es malo? Pregunto, ¿qué sería bueno? Es lo que es. Lo único que me parece, sea cual sea el camino que cada Estado tome, es tratar de no ser deshumanizado. Difícil, sí, pero es la única manera de no convertir al dinero en Dios, como Juan Carlos, en su blog, menciona.

Sin más, me despido como de costumbre, con una cita, bueno con un par. La primera de un americano (más que estadounidense, ya que, por definición, los mexicanos también somos estadounideneses) universal, Benjamín Franklin, y la segunda del autor del libro “El Capital”, Carlos Marx:
“De aquel que opina que el dinero puede hacerlo todo, cabe sospechar con fundamento que será capaz de hacer cualquier cosa por dinero.”
“El poder político es simplemente el poder organizado de una clase para oprimir a otra.”

3 comentarios:

  1. Una de las mayores mentiras que nos han hecho creer es que la mejor forma de gobierno es una democracia. En una democracia perfecta, la mitad de la población más uno, decide lo que será bueno para la otra mitad de la población (menos uno, claro está). Cualquiera que sea la decisión, una mitad no estará de acuerdo con las decisiones tomadas. ¿En verdad esto es una buena forma de gobernar?

    Por otro lado, tenemos que tener en cuenta (nos guste o no), que siempre habrá gente que sea líder y gente que quiera ser guiada. En cualquier forma de agrupación humana, llamese gobierno, iglesia, familia, sociedad, siempre habrá alguien que sea el guia o líder, el que lleve al resto del grupo al objetivo planteado por la agrupación. ¿Acaso eso es malo?

    El problema comienza cuando el líder no lleva al grupo al objetivo deseado. En el caso del gobierno, el objetivo sería el bienestar del país. Si el líder (o lideres) se corrompen y buscan solo un bienestar individual (o grupal) entonces el sistema se ha corrompido.

    Al final, y relacionado con la entrada anterior, todo el problema se encuentra relacionado con las personas.

    Siguiendo la tradición de este blog, terminaré con una cita de un personaje chino de hace algunos años: "Es muy fácil gobernar, todo se basa en no ofender a las grandes familias"

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  2. mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm

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  3. la democracia fue echa para veneficiar a los ricos solamente al proletariado solo lo esclavisa mas ya que las oportunidades son paras los beneficiados economicamente si soy comunista
    y orgulloso de serlo

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